Descripción
Arbolillo perennifolio que pocas veces supera los 6 m, de copa amplia y densa en los ejemplares viejos. Corteza lisa, gris. Hojas compuestas con 4-10 folíolos coriáceos de margen liso y ápice escotado, alternas.
Flores pequeñas, poco vistosas, agrupadas en racimos rígidos que nacen en ramas gruesas, generalmente unisexuales. Las masculinas con 5 diminutas escamas y 5 estambres de anteras rojas; las femeninas con 5 pequeñas escamas y un pistilo amarillento. Florecen en verano.
Fruto en legumbre –la algarroba- que no se abre al madurar, lampiña, gruesa (4 a 6 mm) y pulposa en su interior, de hasta 20 cm de longitud, verde al principio y castaño oscuro en la madurez. Alcanzan su completo desarrollo en el verano siguiente a la floración.
Distribución
Originaria de la región mediterránea, pero su área es confusa debido a que ha sido cultivada desde la antigüedad. En la Península se distribuye por toda la costa mediterránea y atlántica sur, desde el nivel del mar hasta los 700 m.
Es una especie tolerante a la aridez, pero no soporta los inviernos fríos y las heladas tardías. Se desarrolla en suelos calizos o silíceos. Los mejores ejemplares se encuentran generalmente en zonas agrícolas.
Observaciones
Su madera es densa, amarillenta y con duramen rojizo. Las hojas se han empleado para el ramoneo durante el periodo estival. Las algarrobas son comestibles, con un cierto sabor a chocolate en la pulpa. Se han empleado fundamentalmente para alimentar el ganado. Con las semillas se fabrican harinas (garrofín) para diversos usos, desde la alimentación humana hasta hidrosiembras de taludes de obras públicas.
Muy interesante desde el punto de vista ecológico, sirve de refugio a diferentes aves y mamíferos.
Imágenes
Pulsa en las imágenes para verlas a mayor tamaño

Ceratonia siliqua

Ceratonia siliqua

Ceratonia siliqua

Ceratonia siliqua

Ceratonia siliqua

Ceratonia siliqua

Ceratonia siliqua

Ceratonia siliqua

Ceratonia siliqua

Ceratonia siliqua

Ceratonia siliqua

Ceratonia siliqua